ASPADE: Súmate a la inclusión laboral

“Trabajamos día a día para hacer realidad el sueño de la inclusión socio-laboral de muchos adultos con discapacidad intelectual. Súmate y logremos juntos este gran desafío”.

ASPADE (Asociación de Padres y Amigos de Personas con Discapacidad Intelectual), es una asociación sin fines de lucro y un centro de capacitación socio-laboral de personas adultas con discapacidad cognitiva, que potencia al máximo sus talentos para una integración plena en la sociedad, a través de diversos programas de formación.

Su historia comienza en 1986 de la mano de su fundador y ex director Pablo Wiegand (Q.E.P.D), junto con un grupo de padres y amigos de personas con discapacidad intelectual que se cuestionaban qué pasaría cuando sus hijos crecieran y terminaran su escolaridad formal.

“Hace treinta y cuatro años atrás la realidad en Chile era muy distinta para las personas con discapacidad cognitiva y había muchos padres angustiados e inquietos por el futuro de sus hijos, pues luego de los veintiséis años, edad de la que egresaban de las escuelas especiales, no habían programas para continuar su desarrollo ni apoyo estatal o de fundaciones para ellos. Al cumplir esta edad, concluía su participación en la comunidad, entonces Pablo Wiegand —cuya hija es  usuaria de ASPADE—, comenzó este proyecto enfocado en las necesidades que ella y otros requerían. Con el paso de los años esto se fue profesionalizando, realizando distintas actividades, campañas y eventos, siempre con el enfoque familiar que nos caracteriza”, señala Raimundo Grez, presidente del directorio ASPADE.

“Hoy contamos con la Ley de Inclusión Laboral (N°21.015, vigente desde el 1 de abril de 2018), que nos ha permitido seguir creciendo y mejorando nuestros talleres; y que invita a toda nuestra comunidad a repensar los espacios del trabajo para que sean más abiertos, diversos, inclusivos y amigables. Estamos convencidos que nuestros usuarios quieren ser, y de hecho son un aporte tanto para la comunidad como para sus familias y por ello trabajamos en su capacitación para que puedan desempeñar y obtener un trabajo en empresas o instituciones. Esto no sólo les ayuda a contribuir económicamente en sus propias casas, sino que también les reafirma su valor, les permite sentirse independientes y cumplir sus propias expectativas de autonomía, desarrollando al máximo el potencial de sus capacidades”, agrega.

LEY DE INCLUSIÓN

La Ley de Inclusión Laboral busca incentivar y ampliar las posibilidades laborales de las personas con discapacidad, comprometiendo a las empresas con cien o más trabajadores a disponer del 1% de su dotación para tales efectos. “Esta fue una súper buena señal para nosotros y con la cual ASPADE decidió dar un giro definitivo hacia el tema del  empleo formal. Hoy tenemos veintidós usuarios de Quillota, Quilpué, Villa Alemana y Viña del Mar —con edades que fluctúan entre los veinticinco y cincuenta años—, con un espectro de discapacidad bien amplio (leve a moderado) que les permite participar de distintos talleres con suficiente autonomía”, señala Martín Rojas Dattwyler, director ASPADE.

¿Cuáles son sus principales actividades?
Tenemos un taller productivo (cocina), donde se elaboran productos horneados artesanales (alfajores, quequitos, cuchuflies, galletones, etc.) que vendemos a las empresas y a la comunidad. Pueden adquirirlos en nuestra página web (www.aspade.cl) o en nuestro quiosco inclusivo, atendido por los mismos usuarios en la Plaza de Quilpué, actividad  que se retomará pasada la pandemia. Además, contamos con un taller de teatro (donde pueden expresar sus emociones y desarrollar habilidades teatrales), de educación física (fomentando la vida sana y evitando el sedentarismo); y un huerto/vivero, asesorado por un agrónomo-sociólogo, que ha sido muy importante para el trabajo con el medio ambiente.

¿Cómo han seguido las actividades tras la crisis sanitaria?
Desde el 16 de marzo nuestros usuarios no van al centro físicamente, pero hemos desplegado un gran esfuerzo en mantener funcionando la totalidad de los talleres. Estamos trabajando de manera online con las familias y con el apoyo de nuestro equipo de profesionales (educadores diferenciales y terapeutas ocupacionales). Para ello les facilitamos la entrega de materiales, por ejemplo con semillas, tierra, macetas, etc., para elaborar su propio mini invernadero en sus casas o los ingredientes para cocinar. También con la preparación de sus currículos y los pasos a seguir para un trabajo formal, entre otros. Estamos muy contentos, porque hemos tenido una muy buena recepción, tanto de ellos como de sus apoderados. Estos talleres están enfocados a generar una rutina, hábitos, competencias de cuidado, motricidad fina. Por lo mismo, no quisimos paralizar el trabajo y nos adaptamos a los tiempos, con muy buenos resultados.

 IMPACTO POSITIVO
“Tenemos un programa de empleo con apoyo; desde ASPADE contactamos a empresas que deseen contribuir con la inclusión, identificamos las necesidades, características y el entorno, y trabajamos estrechamente con ellos y con la familia, pues sin duda es uno de los pilares fundamentales para un proceso exitoso de inclusión laboral. Los cinco primeros meses los usuarios son acompañados por un profesional de ASPADE hasta que toman cierta independencia en su trabajo. Hoy tenemos a dos usuarios que están trabajando en supermercados de la región (en las áreas de panadería y de reposición). Esto ha sido un impacto muy positivo tanto para ellos, la comunidad, sus compañeros de trabajo y sus empleadores que ven cambios favorables en el entorno y las relaciones humanas”.

¿Cuáles son sus próximos proyectos?
Para este año, y mientras la pandemia lo permita, esperamos insertar en nuevos puestos de trabajo entre seis a ocho usuarios más; y tenemos un compromiso mayor para el 2021. Además, el próximo año queremos renovar el centro y los programas, potenciando aún más la inclusión laboral y que las personas con discapacidad estén más presentes en la sociedad. Buscamos aumentar la productividad de nuestra cocina y continuar ofreciendo programas de desarrollo internos. Esto permitiría, eventualmente, prestar servicios a otras empresas o instituciones bajo la tuición de ASPADE. Lo que buscamos con ello, en definitiva, es explorar posibilidades para usuarios que por algún motivo no puedan optar al empleo formal.

¿Cuál es el llamado a las empresas?
Post pandemia sabemos que el panorama laboral se viene complicado, pero es importante que el empresariado no deje afuera a las personas con discapacidad. Ellos son parte de esta sociedad y esa es la mirada que hay que actualizar. No pierdan la oportunidad de conocer sus habilidades y riquezas, que gracias a su propio esfuerzo, el apoyo de sus familias y profesionales, salen a la luz. Además de abrir sus puertas para darles trabajo, tanto los empresarios como personas naturales, pueden aportar con donaciones, haciéndose socios o trabajando como voluntarios. Vendemos coronas de caridad y los productos de nuestros usuarios para poder apoyar a algunas familias que no tienen los recursos. Todos los aportes son bienvenidos para esta tremenda obra.

www.aspade.cl / Buenos Aires Nº 932, Quilpué / (+56) (32) 291 7185 contacto@aspade.cl