Engolosinados con la cámara  

Por Marcelo Contreras

NUESTRO PLANETA. NETFLIX.

Si nos guiamos por el entusiasmo en redes sociales, prácticamente hay un antes y un después en materia de documentales gracias a esta serie sobre la vida salvaje, la geografía del planeta y sus alteraciones como consecuencia del calentamiento global. Narrada por David Attenborough, reconocido científico y divulgador británico, Nuestro planeta es un magnífico registro en alta resolución pensado para el disfrute en las grandes pantallas HD en el hogar.

Si hasta hace unos años las tendencias en este tipo de registros consistían en adentrarse en primerísimos primeros planos siguiendo en detalle la vida de animales y bichos, acá reinan las grandes tomas aéreas y cámaras sumergidas en mares y océanos, imágenes siempre épicas y de belleza conmovedora.

Nuestro planeta toma algunas decisiones en beneficio de un público familiar. A diferencia de Planeta hostil, de Natgeo, por ejemplo, donde las peleas y cacerías entre animales son de brutal encanto, aquí rara vez vemos agonía y muerte. Algún pingüino despistado cae víctima de unas orcas en notables secuencias en cámara lenta, pero no hay sangre. La voz anciana y el marcado acento británico de Attenborough contribuyen a la sensación de disfrutar de un cuento de la naturaleza filmado con las mejores cámaras.

Al menos en los primeros episodios no hay muchos datos sobre las razones del calentamiento global, sino las consecuencias y el poco tiempo restante para que no resulte irreversible. Sin embargo otra producción en Netflix, como One Strange Rock, narrada por Will Smith y con la participación de astronautas que relatan cómo se observa el planeta desde el espacio, entrega muchísima más información sobre la manera en que todo tipo de vida está interconectada en la faz de la Tierra, también con imágenes espectaculares. En ese sentido, a ratos Nuestro planeta se engolosina sólo con la captura del lente.